Este post pretende ser una visión global de la historia de los hitos cuantificables de nuestro club desde la perspectiva del avance del vector del tiempo. Su objetivo es observar cómo se distribuyen sobre tal vector (que dicho sea de paso acabará por llevársenos a todos por delante) los años de gloria, los años con títulos relevantes.
Los parámetros son (en la gráfica): en negro, las ligas; en rojo de un sólo cuadrado, los títulos europeos relevantes menores (Recopa y Supercopa de Europa); en rojo de cuatro cuadrados le altura las Champions/Copa de Europa.
Hay que decir que el conjunto de datos es estadísticamente poco suficiente: necesitaríamos tener una perspectiva de algunos siglos para poder extraer conclusiones fiables. Pero trabajaremos con lo que tenemos y aventuraremos alguna opinión ahora, dejando para Cherinola el trabajo futuro.
Creo que la observación más destacable es la siguiente: se aprecia una clara compresión de los datos a medida que se avanza en el vector del tiempo. Es un efecto similar al de la formación de montañas por empuje de las placas tectónicas. Es decir: cuanto más a la derecha, progresivamente menores son los espacios en blanco (sequía) y también progresivamente más compactos y "altos" los años con éxitos.
En las ligas el efecto es muy claro. Desde Kubala hasta el siguiente título (Cruyff jugador) se extienden los famosos “catorze (14) anys de passar gana”, que tan acertadamente glosara La Trinca. De ese título de liga al siguiente, el vacío és sólo de 10 temporadas. Luego 5, luego 2. Es decir, a medida que avanzamos hacia el futuro, el vacío se comprime.
Lamentablemente, vemos que a continuación sigue un período en blanco de 5, pero por ser el único dato contradictorio con la tendencia, la prudencia aconseja tener más en cuenta la tendencia que su contradicción, y esperar a tener más datos para ver que ocurre con ese último blank.
Si consideramos de forma conjunta ligas y títulos europeos, observamos también un goteo progresivamente comprimido desde la era post-Cruyff jugador hasta llegar a la explosión de inicios de los 90 (Cruyff entrenador). Ese momento podría haber sido un simple oasis en el desierto, pero combinado con los títulos domésticos y europeos menores de finales de siglo (Ronaldo-Rivaldo), y con una nueva erupción de ligas más champions de mediados de los 2000 (Ronaldinho), la tendencia parece abonar nuevamente la teoría de la compresión de los ciclos. Hasta conseguir la primera Champions se ha tardado infinito: desde el inicio de los tiempos. En cambio, entre la primera y la segunda “sólo” pasan 13 años. Si la tendencia de compresión se confirmara, la tercera debe estar puramente al caer.
Como hemos comentado, el único dato contradictorio en este panorama son los cinco años de vacío entre las ligas de Van Gaal (sí, Van Gaal también ganó ligas) y Rijkaard. ¿Son una pura irregularidad estadística que quedará absorbida por los datos subsiguientes? ¿O es el inicio de una época de descompresión, a partir de la cual los títulos se espaciarán cada vez más hasta volver al marasmo inicial, con el advenimiento de un antiKubala?
Esta temporada es una clave para avistar cuál es la tendencia. Si, como parece, hay liga, seguirá dominando la que invita al optimismo: a medida que se avanza en la historia, mayor compresión de títulos, con menos vacíos de sequía. Si no hay liga este año, habrá que rezar mucho, pero mucho, y seguir observando. Si por aquellas hubiera Champions (este año o alguno de los inmediatos siguientes), la teoría de la compresión se impondrá gloriosa y victoriosa: nuestra historia es definitivamente un continuo ir a más y está claro que llegaremos a un punto estadístico en que los títulos estarán tan apretados en el tiempo que plantaremos tienda en Canaletas y sucumbiremos despreocupadamente de cirrosis.
GASHINA: Maxi
TRAFAJANDO: Cada vez menos, con lo de la crisis.
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